La violencia armada es un problema que nos afecta a todos, pero no a todos de la misma manera. Nuestra campaña busca iluminar las múltiples caras de este flagelo y sus impactos diferenciados en nuestra sociedad.
Durante el mes de octubre, la Fundación Arias para la Paz y el Progreso Humano llevará a cabo esta campaña con el objetivo de promover la comprensión y el análisis del impacto diferenciado de la violencia armada en las diversas identidades de género. Buscamos combatir la desinformación y las narrativas simplistas que oscurecen la verdadera conexión entre la violencia armada y la violencia de género.
Para ello, estaremos publicando notas en nuestra página web y redes sociales, las cuales se complementarán con actividades presenciales y virtuales diseñadas para fomentar el diálogo y la reflexión.
¿Qué es la violencia armada?
Puede definirse como el uso intencionado de armas (amenazado o real) contra uno mismo, contra otra persona o contra un grupo, comunidad o Estado. Provoca o tiene muchas probabilidades de provocar daños físicos (lesiones de muertes), daños psicológicos, daños sexuales, maltrato o privaciones.
Un costo que va más allá de las víctimas
El impacto de la violencia armada es devastador y va mucho más allá de las lesiones y las muertes. Genera un profundo miedo e inseguridad que deterioran el tejido social, comprometen el desarrollo de comunidades enteras y limitan el acceso a servicios esenciales como la educación y la salud.
Además, impone una pesada carga a las economías nacionales y causa una división palpable en la sociedad.
El rostro oculto de la violencia
El nombre de nuestra campaña, “La Violencia No Tiene Un Solo Rostro”, refleja una realidad crítica:
- Hombres y niños constituyen la mayoría de las víctimas mortales por homicidios con armas de fuego.
- Mujeres y niñas enfrentan esta violencia de maneras específicas, incluyendo el uso de armas en actos de violencia de género y violencia sexual.
- Las personas LGBTIQI+ y quienes no se ajustan a los roles de género tradicionales también son blanco de violencia, incluyendo actos de violencia sexual y ejecuciones extrajudiciales.
Comprender la complejidad de la violencia armada es el primer paso para construir una paz duradera. En la Fundación Arias para la Paz y el Progreso Humano, trabajamos para visibilizar estos impactos y construir soluciones que protejan a todas las personas.